Y todo el mundo me mira con cara de horror ¿te vas a atrever a conducir en Colombia?
Cualquiera diría, ni que el tráfico estuviera tan mal.

Mi experiencia automovilística dará que hablar, sino al tiempo.
La decisión es cambiar de geografía para "cambiarlo todo"; para extraviarme, reencontrarme y empezar de nuevo con la esperanza de que en mi más allá no reaparezcan los errores de siempre; con la esperanza de que en mi no asumida valentía, siga, a diario, sorprendiéndome.